martes, noviembre 24, 2009


Esta película es un gran ejercicio de nostalgia por dos razones. Primero, porque de hecho se hizo como homenaje a toda la cultura pandillera de los '50, ya muerta y enterrada en la época de su estreno. Segundo, porque entre los secundarios hay desconocidos tan ilustres como Stallone, Armand Assante y Ray Sharkey, actores novatos para ese tiempo. La historia es sobre un grupo de pandilleros que pasan el tiempo oscilando entre violar la ley y buscar un trabajo seguro. Nada muy edificante. Pero la nostalgia que despiertan sus imágenes es impagable. Gran banda sonora.